Sunday, July 03, 2005

respuesta a Vivaro

Vivaro preguntó:


...Pregunta a la Voz de Dios (el artista conocido como Frank Sinatra y ahora llamado Fernando Celaya) Oh, querido e idolatrado oráculo, he aquí que oso (de osar y de oso que cumplo ambas situaciones) preguntar. Teniendo en cuenta que en la santa biblia en el Deuteronomio capitulo 20 La Guerra y los combatientes en una estrofa expone:Cuando te acerques a una ciudad para atacarla, le brindarás primero la paz. Si la acepta y te abre sus puertas, todos los habitantes que haya en ella te servirán como esclavos en trabajos forzados. Si rechaza la paz y te declara la guerra, la atacarás. El Señor, tu dios, te la pondrá en tus manos, y pasarás al filo de la espada a todos sus varones. Las mujeres, los niños, los ganados y lo que haya en la ciudad, lo tomarás contigo y disfrutarás del botín que tu señor, tu dios, te ha dado. Sabiendo que esto es lo que ordena El señor, tu dios. ¿El coherente con que la portada del Omnia 121 tenga la imagen de Abert Einstein? Agradecido te queda un humilde servidor del oráculo a la espera de la respuesta y si fuese posible y no fuese mucho atrevimiento también solicitaría una explicación del porque a la respuesta para así iluminar y realizar jubilo en mi vida...



Sí.

La explicación de la respuesta es elemental: como todos sabemos, Albert Einstein era judío, y, por tanto, para él el Antiguo Testamento de la Biblia de Jerusalén es, ni más ni menos, que la historia, cultura, moral, y, sobre todo, ley de su pueblo.

Es sabido que el pueblo judío interpreta de forma que no admite el menor desvío las leyes, reglas, normas y pautas de las Sagradas Escrituras, comunes para judíos y cristianos (y en parte para musulmanes) hasta el momento de la aparición en escena de Jesús de Nazaret. Ello trae como consecuencia que, por sorprendente que pueda parecernos a los gentiles (gentil es la voz que los judíos emplean para referirse a los no-judíos), todo lo escrito es ley, es vigente y es de aplicación.

Es llegados a este punto que, sin duda, podemos afirmar que unos de los judíos más célebres de todos los tiempos, Einstein, al que llegó a ofrecérsele la jefatura del Estado de Israel, es fiel reflejo de la creación del dios común de todos los monoteistas (pero al que judíos, musulmanes y cristianos -en sus distintas modalidades- adoran de manera diferente), y ejemplo más que idóneo.

Y es el dios de los judíos el más antiguo de todos, y por ello y por ende el que ha de prevalecer, y son así los hijos de su pueblo elegido, el de Israel, los que han de simbolizar y representar en todos los ámbitos y órdenes la obra suprema del creador.


Laus ano gratia plena.

Lumen Dei

0 Comments:

Post a Comment

<< Home