Sunday, July 03, 2005

respuesta a Insegura

Insegura preguntó:

...Mi bienamado gurú;
Tal vez pueda resolverme una duda que me constriñe las neuronas. ¿Cree usted que se dá la paradoja de que una mejora constante de la gestión del circulante, materializada en un incremento progresivo de la rotación de los activos circulantes, manteniendo constante la rotación de los pasivos circulantes, lleva inexorablemente a un empeoramiento de la ratio de liquidez y, por consiguiente, a un empeoramiento de la situación financiera de la entidad?...


Ni por lo más remoto.

Con la empresa ocurre como con la mujer, que la que es corriente no alterna, y si la tocas te sacude. Así, cuando la actividad constitutiva de empresa o de industria hace que en un determinado momento sintamos en nuestro ánimo la congoja de preguntas como la que me planteas, querida hermana, es el problema de raíz el que hay que extirpar.

De manera que si posees los medios de producción, véndelos presto o ponlos bajo el estricto control de personas de tu confianza, con los poderes adecuados para ello, de forma y manera que en nada y de nada hayas de preocuparte, pues el simbionte nacido del dominio de ciencias como son la economía y la psicología, nos presentan a las claras en tu caso un alma en pena, una psique desgarrada por el desasosiego, al leer el enunciado de la inquietud que atenaza tu ánimo.

Habrás muy empero de buscar otro camino, aquel que guíe tu vida en la dirección que tomó mi admirado abuelo José, rentista de profesión, y que logró dos metas a saber; vivir hasta los noventa y nueve años, y que en su lápida rece el epitafio en los siguientes términos: "Jamás trabajó".

Si el caso fuera muy otro, esto es, si es el empleo lo que te lleva a la empresa (y no la propiedad de sus pasivos), razón más que sobrada para que cualquier inquietud del tipo que planteas que se instale en tu mente deba ser, de inmediato, sacudida cual insecto molesto que viene a turbar tu paz, que en poco ha de beneficiarte la inquietud por cómo vaya o venga la circulación de lo que es de titularidad ajena.

Y si la duda viene derivada del ejercicio de la docencia, es entonces en la elasticidad de la curva de la demanda, aplicada al producto, donde habrás de centrar tu interés, pues de poco servirá la teoría económica si, en último extremo, nos olvidamos del volátil y caprichoso sino de la venta y sus misterios, desenlace último de todo capital aplicado a la empresa.

Quédate por fin, querida amiga, con los rudimentos esenciales del pueblo judío en lo referente a la circulación de los pasivos, que es nación-secta de comerciantes pentamilenarios, y nadie sabe mejor que ellos cómo manejar el flujo propio y ajeno, hasta el punto de que las transacciones que entre ellos realizan son siempre, y sólo, de palabra, y dicen así: "comprarás y venderás, pero no fabricarás".

Y ahora puedes retirarte, deberás rezar tres padrenuestos y tres avemarías. Tus pecados están perdonados.

Lumen Dei

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